Tras la reunión con Ramón Jesurún, Presidente de la FCF, se conoció que José Pékerman renunció a la dirección técnica de la Selección Colombia, en la que estuvo desde 2012 logrando la clasificación a dos Mundiales y la mejor actuación de la ‘tricolor’ en la historia de la Copa del Mundo en Brasil 2014. El entrenador argentino expresó su agradecimiento, su molestia por algunas mentiras que se dijeron en el último mes y le deseo lo mejor a la Selección.
Sensaciones tras la reunión: «Muy feliz de haber participado en esta charla a la altura de lo que merece la Selección. La prioridad es la Selección nacional como lo hemos hecho en la etapa que hemos estado. Agradecerles a todos como lo he dicho en cada uno de los partidos, con esa camiseta tan hermosa. En cada gol y en cada triunfo quería abrazar a cada uno de los colombianos y eso lo he sentido permanentemente. Pedirle disculpas a mi hija colombiana que debe estar llorando. La ilusión de los colombianos venía muy caída y fortalecimos ese vínculo de sentir la camiseta en todo el mundo».
«Le deseo al Comité Ejecutivo la mejor de las suertes y saber que siempre voy a estar pendiente de Colombia, tanto en el fútbol como en el país, en la gente. Ojalá que los éxitos continúen, que los que plantean exigencias no se peleen. El fútbol es de mucha pasión y se pierde la objetividad. Que puedan tener la claridad de pensamiento para tomar las mejores decisiones y saber que hemos dejado todo y que esto continúa, siempre esperando lo mejor de la Selección hacia el futuro».
Agradecimiento y buenos deseos: «Cuando haces algo bien hecho y miras para atrás, las cosas que pedía el pueblo, me encanta. Fue paralelo el crecimiento conjunto con lo que desarrollan los clubes, pero con la Selección termina de impulsarlos y mostrarlos al mundo. Ver siempre a Colombia arriba, ganando posiciones en la clasificación FIFA, eso no puede dejar más que alegrías que me las llevaré por siempre. Objetivos planteados: Cumplidos«.
«Espero que se aclaren mucho las ideas. No hubo ningún tipo de condicionamientos y lamento todo el tiempo que ha perdido hablando de muchas cosas, porque le han hecho mucho daño a la Selección. Ojalá todos se unan. Lo dije cuando llegué en 2012: ‘vamos a clasificar al Mundial (Brasil 2014), pero tenemos que trabajar juntos’. Apoyen a la Selección desde el lugar que estén. No hay que estar conformes con lo que se ha hecho hasta ahora. Hay un camino duro que se ha realizado y hay que continuar».
Los rumores y contacto con jugadores: «No he tenido contacto con los jugadores. Siempre he tenido una conducta en mis actos. No me ofrezco en ningún lado, espero la finalización de mi contrato a ver cuál es el rumbo que se va a tomar. No empiezo a hablar con otras selecciones ni mi asistente atiende a nadie. Tengo un respeto por el lugar donde estoy. Me han puesto en todos los lugares del mundo y nunca salí de acá (Bogotá) después del Mundial. La cantidad de mentiras y barbaridades que se han dicho son una decepción muy grande».
«Los jugadores no pueden estar involucrados en este tipo de situaciones. Hay un respeto, afecto y cariño y la parte emocional hay que dejarla de lado. Me pongo a llorar si empiezo a recordar momentos vividos. Yo les dejé un mensaje desde el momento en que llegamos: ‘Ustedes están convocados para un amistoso y Colombia tiene que ganar y jugar bien. El que se pone esta camiseta tiene que demostrar por qué se la pone’. Este es el momento menos indicado para hablar con los jugadores, es algo que no corresponde. La digirencia y nosotros tenemos que tomar las decisiones. Las emociones hay que dejarlas de lado y mirar siempre hacia adelante».
Su futuro: «¿Cómo puedo estar pensando qué voy a hacer si no duermo desde que terminó el Mundial? Yo sé que tengo a mi esposa, a mis hijas y mis nietos que no los veo a ese tiempo, que en este proceso perdí a mi madre y a mi hermano, que no pude verlo, no pude estar en sus momentos críticos. Siempre el compromiso está primero, entonces no puedo hablar de lo que viene».
