Uno de los grandes futbolistas del mundo en todos los tiempos, dejará de asistir a los campos de fútbol y se reunirá con otro par de leyendas que recientemente dijeron adiós: Pelé y Maradona.
“Con profunda tristeza les informamos de que mi marido y nuestro padre Franz Beckenbauer se durmió en paz ayer domingo, rodeado de su familia. Les pedimos que guarden luto en silencio y se abstengan de hacer preguntas”, dictó el comunicado emitido por la familia de la leyenda alemana. De momento, no se dieron a conocer los detalles en torno al entierro del mito.
El Kaiser Franz Beckenbauer, nació el 11 de septiembre de 1945 y falleció el domingo pasado,a los 78 años, y lo hizo rodeado de sus seres queridos. La muerte de su hijo Stephan en 2015, un infarto ocular, varias operaciones de corazón y el Párkinson le azotaron a lo largo de los últimos años hasta que, finalmente, falleció.
Beckenbauer marcó el fútbol alemán como ninguna persona a lo largo de su laureada carrera. Campeón del mundo como jugador (1974) y entrenador (1990). Lo ganó todo con el Bayern de Múnich y fue la pieza clave para traer el Mundial de 2006 a la Alemania.
Ganador de dos Balones de Oro (1972 y 1976) y fue incluido en 2020 en el Dream Team histórico del galardón, además de ser presidente de honor del Bayern, se había enfrentado en los últimos años a numerosos problemas de salud. Fue sometido a dos cirugías cardíacas y a un implante de cadera. “Tuve un supuesto infarto ocular en un ojo. Lamentablemente, ya no puedo ver nada con el derecho. Y debo tener precaución con mi corazón”.
El Kaiser también ganó: cuatro ligas y cuatro copas alemanas; tres Copas de Europa consecutivas entre 1974 y 1976; una UEFA en 1967; una Intercontinental en 1976. Todo con el Bayern. Además de ganar la Bundesliga en 1982 ya en las filas del Hamburgo.
