Colombia cayó por 2 a 1 con Corea del Sur en el segundo partido con Carlos Queiroz en el banco. Más allá de lo deportivo todo indica que entre colombianos y coreanos se está generando una rivalidad que va más allá de la cancha.
Al finalizar el encuentro, Heung-Min Son, autor del primer gol y principal estrella de los Tigres asiáticos, se dirigió a los colombianos con varios gestos con la mano con los que indicaba que hablaban de más.
El gesto habría sido dirigido a Luis Díaz, el mejor jugador de la Tricolor y autor del único gol.
El compañero de Davinson Sánchez en el Tottenham no tuvo respuesta de los cafeteros que lo saludaron en una muestra de deportividad.
Esta no es la primera vez que se cruzan gestos entre jugadores de las dos selecciones. El episodio más recordado fue el protagonizado por Edwin Cardona, en un amistoso jugado a finales de 2017.
Pese a que el 10 pidió disculpas, la FIFA calificó esta mueca como un insulto racista y el jugador terminó siendo sancionado por cinco partidos, el castigo más fuerte por esta clase de violaciones al reglamento. La primera de una serie de malas decisiones por las que el antioqueño se perdió el Mundial.
Al final del partido, Son destacó la labor de los colombianos: “Colombia es un equipo muy difícil y es complicado ganarles. Tienen mucha calidad pero creo que merecíamos ganar”.
Con respecto a Davinson también tuvo palabras de elogio. “Davinson es un gran amigo mío, está jugando una gran temporada y me gustó haber podido jugar contra él”.