El legendario mariscal de campo Tom Brady volvió a brillar de manera especial sobre el emparrillado y no sólo porque llevó a los Patriots de Nueva Inglaterra al partido por la final de la Conferencia Americana (AFC), sino porque impuso marca de liga al hacer tres envíos de touchdown.
A sus 40 años hizo posible, que los pronósticos que daban favoritos a los Patriots, que defienden el título de campeones del Super Bowl, una vez se cumpliesen con otra exhibición de juego de equipo e individual ante unos rivales como los Titans de Tennessee, que confirmaron que habían llegado más al partido por el factor suerte que por el potencial que mostraron en el campo.