El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, calificó hoy de «un honor» que España vaya a albergar la final de la Copa Libertadores de fútbol entre el Boca Juniors y el River Plate y garantizó la seguridad para que ese día triunfe el fútbol.
Sánchez se refirió a la final entre ambos equipos que se disputará el 9 de diciembre en el estadio Santiago Bernabéu de Madrid, en la conferencia de prensa que ofreció al término de su participación en la cumbre del G20 de Buenos Aires.
Al plantearle si está en condiciones de garantizar la seguridad de ese partido tras los incidentes en Buenos Aires que obligaron a suspenderlo, el jefe del Ejecutivo resaltó en primer lugar el «honor» que supone albergar ese «superclásico».
Sánchez añadió que España siempre estará del lado del deporte y la convivencia.
Además, aseguró que el Gobierno va a desplegar todo el aparato de seguridad que siempre se ha puesto en marcha ante otros grandes acontecimientos deportivos.
Tras recordar que no es la primera vez que se celebran en Madrid eventos de tanta relevancia deportiva, insistió en que esa seguridad garantizará que «los únicos protagonistas sean el fútbol, los futbolistas y el gran pueblo argentino».
Una ciudadanía argentina que se mostró convencido de que «disfrutará de una gran final».
La Confederación Sudamericana de Fútbol acordó que se juegue en Madrid el partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores que debía haberse disputado en Buenos Aires, pero que se suspendió el pasado sábado a causa de los incidentes violentos en los que resultaron heridos varios futbolistas del Boca Juniors.